Ricardo Ordóñez /ICAL - Celebración del Milagro de la Luz

Centenares de personas contemplan en San Juan de Ortega el ‘Milagro de la Luz’

L. Sierra - El fenómeno religioso, arquitectónico y astrológico se produjo a pesar de que las condiciones climatológicas no eran las mejores

El conocido como ‘Milagro de la Luz’ se dio a pesar de que minutos antes de su comienzo, el propio párroco del Santuario de San Juan de Ortega se disculpase ante el público congregado allí porque “no había luz solar”. Un milagro, “ha sido un verdadero milagro”, destacó el párroco, Pablo González, en declaraciones a la Agencia Ical. En el último momento, a las 18.10 horas de la tarde un rayo de sol penetró en una de las ventanas ojivales del templo para que se produjese el milagro.

El de San Juan de Ortega es uno de esos fenómenos que por su peculiaridad reúne cada equinoccio, tanto en el de primavera como en el de otoño, a centenares de curiosos y peregrinos del Camino de Santiago que se agolpan para contemplar una insólita imagen capaz de captar la atención de creyentes y no creyentes. Cada 21 de marzo y 22 de septiembre, coincidiendo con el comienzo de la primavera y del otoño, respectivamente, un rayo de sol penetra a media tarde por una de las ventanas ojivales de la fachada del Santuario y da luz al capitel que se encuentra situado a la izquierda del ábside, que se corresponde con la escena de la Anunciación.

Así lo marca el protocolo y así se realiza cada equinoccio, pero este año todo apuntaba a que no se daría milagro. La localidad burgalesa de San Juan de Ortega, paso obligado del Camino de Santiago francés, amaneció encapotada y así siguió todo el día, sin un solo rayo de sol. El alcalde de la localidad, José Manuel Pérez, manifestó minutos antes de que se produjese el fenómeno que “era una auténtica pena que no hubiese ni un rayito de sol”. Pero, aproximadamente a las 18.10 horas el fenómeno, que estaba previsto que se manifestara diez minutos antes, comenzó a desarrollarse.

Religión, arquitectura y astronomía

“El fenómeno es siempre el mismo y en él se conjugan elementos religiosos, arquitectónicos y astronómicos”, explicó el párroco del Santuario. La luz entra por la ventana más pequeña del templo y se posa en el capitel románico dedicado al capítulo bíblico de la Navidad. Pasa por la Anunciación, luego la luz se posa en la parte dedicada al del Nacimiento, para concluir en el espacio dedicado a la Adoración de los Reyes Magos. Un efecto luminoso que, aunque suele durar apenas dura diez minutos, retiene la atención y el silencio de cuantas personas se congregan en el templo.

El Monasterio de San Juan de Ortega se encuentra ubicado en el este de la provincia de Burgos y muy cerca de la provincia de La Rioja. Este es el motivo por el que “año tras año nos visitan muchos riojanos”, según recalcó el alcalde, quien añadió que muchos años llegan excursionistas desde puntos de la geografía española como Madrid, Valladolid o Zaragoza, además de peregrinos.

‘El Milagro de la luz’ se descubrió en los años 70 después de que se ejecutasen unas obras de restauración en el coro del templo que posibilitaron la visión del efecto. Fue precisamente el párroco de aquellos años, Miguel Alonso, quien después de pasar largas horas dentro del templo quien descubrió que “algo pasaba allí”, según afirmó el edil. Fueron las comprobaciones de un historiador las que dieron al capitel románico, construido en el siglo XII, la fama que arrastra hasta el día de hoy. Había nacido un milagro.
Ricardo Ordóñez / ICAL
El santuario de San Juan de Ortega revive el 'Fenómeno de la Luz Equinoccial', más conocido como 'El Milagro de la Luz'
Ricardo Ordóñez / ICAL
El santuario de San Juan de Ortega revive el 'Fenómeno de la Luz Equinoccial', más conocido como 'El Milagro de la Luz'
Ricardo Ordóñez / ICAL
El santuario de San Juan de Ortega revive el 'Fenómeno de la Luz Equinoccial', más conocido como 'El Milagro de la Luz'
Ricardo Ordóñez / ICAL
El santuario de San Juan de Ortega revive el 'Fenómeno de la Luz Equinoccial', más conocido como 'El Milagro de la Luz'